De película, un joven de 22 años venía siendo vigilado por oficiales ante las sospechas de que era un ladrón, y para confirmar sus fechorías decidieron seguirlo detenidamente sin imaginar que tenía un gran amigo de cuatro patas que lo acompañaba en cada ‘atraco’.
El delincuente fue capturado por el Grupo Terna de la Policía Nacional del Perú justo en el instante donde se dirigía a robar un celular a un conductor, luego de llevar a cabo su acto delictivo corrió por la zona junto a su perro labrador tras el.
De inmediato las autoridades dieron el aviso para dar con el ladrón pues ya venía siendo vigilado y estaban atentos al momento de su robo para proceder con la detención.
Una vez puesto a disposición de los oficiales el joven estalló en llanto pero no por haber sido capturado sino porque dejaba abandonado a su perro con quien vivía y afirmó que era el único que lo acompañaba para todo lado.
“Es labrador, se va a perder mi perro (…) Yo no lloro porque me han intervenido, lloro por mi perro, es el único que vive conmigo y lo han dejado solito en la calle”, dijo el delincuente a las autoridades entre lágrimas.